Galicia, con la declaración del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Illas Atlánticas se ha dado un paso más en la conservación.

    El 13 de Junio del 2002, la noticia era oficial y durante esa misma mañana el Congreso de los Diputados había dado el último paso de la tramitación parlamentaria, la aprobación de la Ley de Declaración del Parque Nacional.

    Este proyecto hoy hecho realidad se inicia con la propuesta del Parlamento Gallego y ha contado con el apoyo de todos los grupos parlamentarios. El nuevo Parque Nacional de Illas Atlánticas ampara bajo esta figura de protección, la mayor que existe en nuestro país, un total de 8.400 hectáreas de las que 7200 son marinas.

    Las Illas Atlánticas se extienden por los archipiélagos de las Islas Cíes, Ons y Onza, Sálvora e islotes de su entorno y la isla de Cortegada, Malveires y otras islas próximas.

La creación del parque no ha estado exenta de polémica. Colectivos ecologistas como ADEGA. FEG, SGHN y SEO hicieron llegar meses antes al Ministerio de Medio Ambiente y la Consellería de Medio ambiente gallega un documento solicitando la ampliación del parque, el escrito sugería proteger las Islas Sisargas y otros tramos de costa además de ampliar la franja marítima por encima de los 10 metros de profundidad que establece la ley.

Pese a sus reivindicaciones, han quedado fuera de los limites la Isla de Loberías, San Simón y Sisargas y la franja terrestre de Costa da Morte y San Adrián, entre otros enclaves de gran valor ecológico. Pero respecto al planteamiento oficial se han incorporado variaciones, como la incorporación de la plataforma marina que no estaba contemplada en un primer momento.

    Es en el espacio marino donde se ha encontrado una mayor riqueza ecológica del parque. Allí se han identificado nada menos que 200 especies de algas que sirven de soporte a una singular comunidad de invertebrados. Por otra parte, el medio acuático protegido es considerado por los expertos un excelente punto de cría de peces y mariscos, al tiempo que esta constatada la presencia de hasta 5 especies diferentes de cetáceos, entre los que destaca la presencia de la marsopa (Phocoena phocoena) y el delfín mular (Tursiops truncatus) en el anexo II de la Directiva Europea Hábitat.

    En la zona terrestre del parque se han diferenciado alrededor de 400 especies vegetales y alberga una inabarcable variedad de aves, la mayor colonia de cría del Cormorán Moñudo (Phalacrocórax aristotelis) en España, la mayor colonia de cría de gaviotas patiamarillas (Larus cachinnans) de toda Europa y poblaciones de Arao (Uria aalge), Alcatraces (Sula bassanus) , Frailecillos ( Fratercula arcaica)...

    Aprobada la ley del Organismo Autónomo Parques Nacionales se crea la Comisión Mixta de Gestión para redactar el Plan Rector de Uso de Gestión del Parque, que regula toda la actividad dentro del parque.