Francia quiere reabrir la pesquería de la anchoa en el golfo de Vizcaya el próximo mes de abril y establecer un total admisible de capturas (TAC) mínimo que podría rondar las 4.000 toneladas. Tal es el empeño de los galos en reabrir el caladero que, según ha podido saber La Voz, están dispuestos a realizar concesiones históricas y aceptar viejas demandas de la flota gallega, como permitir el acceso de los buques españoles a la franja de seis millas de aguas territoriales o reducir sus capturas de alevines de bocarte para su empleo como cebo vivo.
La cumbre de ministros de Pesca que ayer arrancó en Bruselas para fijar los TAC y cuotas para el 2006 se presenta larga e intensa, a juicio de la conselleira de Pesca, Carmen Gallego, que acudió al Consejo en representación de las comunidades autónomas españolas. La ministra Elena Espinosa eludió comentar el resultado de la entrevista a tres bandas que mantuvo por la tarde con los portavoces franceses y de la presidencia británica, foro en el que se puso sobre la mesa la posibilidad de reabrir el caladero en abril, dos meses antes de la fecha que la Comisión Europea propone para levantar la veda, siempre que los informes científicos de primavera hayan constatado la recuperación de la pesquería. El nuevo plazo apuntado permitiría a los pesqueros gallegos iniciar la costera, aunque a expensas de que exista stock de la especie.
«No hay resultados»
«Todavía no hay resultados», dijo ayer Espinosa, quien reconoció que Francia ha puesto sobre la mesa por primera vez algunas concesiones que no quiso especificar. Por la mañana, la ministra había aludido a una supuesta división del sector sobre el TAC cero, asegurando que «una parte estaría dispuesto a aceptar un mínimo» en el golfo de Vizcaya.
El año pasado, los Veinticinco acordaron una cuota de 30.000 toneladas -27.000 para España-, a pesar de que Bruselas había recomendado un tope de 5.000 toneladas debido al mal estado del caladero. La costera del 2005 fue una de las peores de los últimos lustros, y provocó en junio el establecimiento de una veda que dura hasta hoy, y que Bruselas propone extender al 2006 revisándola en primavera.
La presidencia británica entregará hoy una nueva propuesta, en la que España también espera ver mejoradas sus cuotas de gallo y rape. Su última oferta suavizaba los recortes sugeridos por la Comisión para especies como el jurel, la merluza y el gallo, con los que Espinosa se mostró satisfecha.
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