La persistente aparición de vieiras muertas en las redes de barcos, sobre todo en las rías de Pontevedra y Vigo, incrementa el temor de las cofradías por la supervivencia de los bancos de este molusco. La situación es especialmente alarmante y la Consellería de Pesca está estudiando las causas de esta mortandad y analizando cómo hacer frente a una crisis similar a la que se dio hace un decenio. En algunos pósitos, como en el de Bueu, se habla incluso de un panorama sin precedentes: «Estamos ante un asunto muy serio y corren peligro poblaciones completas, porque hay muchísima vieira muerta».
Los barcos del cerco primero, y todos los que emplean otras artes después, comenzaron a detectar desde hace más o menos un mes una cantidad inusual de vieira muerta y de conchas vacías en las aguas exteriores de las rías. En un primer momento, algunos pósitos pensaron que se trataba de un episodio puntual, pero con el paso del tiempo ha aumentado la alarma al comprobarse cómo la mortandad también se hacía sentir con virulencia en el interior, sobre todo en la ría de Pontevedra.
Las cofradías están seguras de que la causa de este suceso se encuentra en la alta proporción de toxina paralizante, conocida como PSP, que no cesa de llegar en sucesivas oleadas a las costas gallegas desde hace meses.
Tras realizar los análisis habituales, se ha descartado cualquier relación con algún otro agente contaminante externo. En el caso de la ría pontevedresa, un portavoz de Bueu resaltó: «Según informes biológicos, no hay una presencia elevada de cloruros ni de plomos en la ría, porque los índices son los normales. La única conclusión es que la marea roja está afectando, y mucho, a la vieira».
Otro dato empírico que refuerza la tesis de que es la toxina la que está matando al bivalvo es que cuando Galicia sufrió el último episodio serio de proliferación de células paralizantes en el agua, en el año 1995, también llegó acompañado de una mortandad elevada de la vieira. Y la mayor pérdida se dio, precisamente, en las áreas en las que había más concentración de toxina.
Aunque es la vieira la principal especie afectada, también se ha detectado un aumento de la mortandad en los bancos de ostra, que comparte con aquel molustro hábitat y comportamientos vitales.
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