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| Cuando vaya a asar un pollo en el horno, empiece por ponerlo 25 minutos apoyado sobre un muslo, 25 más sobre el otro muslo y los 10 minutos restantes sobre el dorso. Apague el horno y deje el pollo unos minutos en la boca del horno, tapado con papel de plata y apoyado sobre la pechuga. De esta manera, la carne se esponjará y los jugos desprendidos regarán las pechugas que siempre suelen quedar un tanto secas. |
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