Cuerpo algo más alargado que el resto de los gádidos. Mandíbula ligeramente prominente; carece de barbillones. El ojo es de igual longitud que el hocico. La línea lateral es casi rectilínea. Los dientes son agudos y curvados y las escamas pequeñas. El borde posterior del opérculo y la base de las pectorales presenta frecuente manchas negras. La cavidad bucal es azulada violácea (algo mas clara en los jóvenes). El peritoneo es negro. Presenta tres aletas dorsales y dos anales. El dorso es grisáceo; los flancos son plateados y el vientre es blanco. A veces presenta manchas oscuras en los flancos y una oscura en el extremo del opérculo y en la base de las pectorales. La primera y segunda aleta dorsal son triangulares cortas y agudas, estando separadas por una distancia semejante a la longitud de una de ellas. La primera aleta anal es muy larga y la segunda es semejante a la tercera dorsal. La aleta caudal es bastante escotada. Las pectorales sobrepasan el inicio de la primera dorsal. La bacaladilla tiene el cuerpo más alargado que el resto de los gádidos. La carencia de barbillones junto con la gran separación de sus aletas dorsales son las dos características más fáciles de observar y que pueden servir para diferenciarla de otras especies cercanas. La primera aleta anal está más avanzada que en cualquier otro gádido.
Puede alcanzar 20 años y 50 cm de longitud y un peso de 300 gr. En nuestras costas Cantábricas comienzan a ser masivamente capturados a partir de los cuatro años y con unos 20 cm de longitud. Las hembras tienen mayor longitud que los machos para la misma edad.