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De ser posible, es ideal que ninguna parte del equipo quede colgando fuera de la mochila, porque puede mojarse en caso de lluvia, además de dificultar el tránsito a través de picadas o zonas de achaparrada vegetación. De todos modos, hay tres excepciones casi imposibles de evitar: el machete, el aislante para la bolsa de dormir y algunos metros de cuerda como para improvisar un cruce en tirolesa o un corto rappel. |
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