El elevado ritmo de desarrollo impuesto por el sistema económico actual, así como las necesidades derivadas del proceso globalizador, han desencadenado un incremento vertiginoso de la cantidad de productos contaminantes vertidos en la naturaleza, superando ampliamente la capacidad de regeneración de ésta, así como su potencial de absorción y degradación biológica de dichos elementos contaminantes.
El ritmo de desarrollo y consumo persigue el suministro constante de productos elaborados, sin tener en cuenta que las materias primas de los mismos provengan de la destrucción y poca renovación de los recursos naturales del planeta, los cuáles llegará un momento determinado en que no darán abasto para seguir con esta vorágine ambiental.
La contaminación del medio ambiente constituye uno de los problemas más críticos en el mundo, y es por ello que ha surgido la necesidad de la toma de conciencia la búsqueda de alternativas para su solución.
Las actividades económicas, en todas sus variantes (intercambio, concepto de dinero…), son parte esencial de la existencia de las sociedades, puesto que ellas permiten la subsistencia, la producción de riquezas, el trabajo de los individuos y generan los bienes y servicios que garantizan su bienestar social. Las actividades económicas en la sociedad capitalista son cada día más complejas y requieren del uso y tecnologías más avanzadas, con el objeto de mantener la productividad competitiva en un mercado cada vez más exigente. En la actualidad, muchas actividades económicas son fuente permanente de contaminación.
De esta forma se nos presenta el dilema de compaginar entre la necesidad de mantener y ampliar nuestras actividades económicas, por el significado social que ellas tienen en la generación de riquezas; y al mismo tiempo la de tomar conciencia sobre la contaminación ambiental que éstas causan, buscar soluciones y mantener el equilibrio ecológico y ambiental.
La sociedad tecnológica ha avanzado prácticamente sin tomar en cuenta el peligro en que sitúa a las especies animales y vegetales.
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