* Aparato respiratorio: consta de uno o dos pares de branquias. Responden a una estructura denominada ctenidio, que consiste en un tronco central del que salen cientos de laminillas paralelas y finas, porque presenta una capilla de células epiteliales. Por dentro del eje está el vaso aferente (vaso ascendente que lleva la sangre dentro) y el vaso eferente (vaso que desciende y retira la sangre). En cada lámina entra y sale un vaso que proviene del aferente y del eferente. Es ahí donde se produce el intercambio gaseoso: cede dióxido de carbono y capta oxígeno. Estos ctenidios son muy blandos, muy vulnerables y por eso se protegen dentro de la cavidad paleal. Lo normal es tener 2 ó 4 branquias.
* Aparato circulatorio: es un aparato de tipo abierto, compuesto por un corazón y una serie de vasos. El corazón tiene un ventrículo y dos aurículas. El vaso dorsal sale del ventrículo y se ramifica en el hemocele, la sangre baña directamente las vísceras. También hay un sistema colector de vasos, del hemocele van a los vasos aferentes (uno a cada branquia), entra en las branquias y se intercambian gases, sale por los eferentes llegando al final a las aurículas. Finalmente, de las aurículas pasa al ventrículo para cerrar el circuito. La molécula transportadora de oxígeno más característica es la hemocianina (núcleo central del grupo hemo).
* Celoma: en el molusco es una cavidad no muy bien representada, contiene: al corazón (cavidad pericárdica), a las gónadas (cavidad gonadal) y a los nefridios (constituyen el aparato excretor).
* Aparato excretor: presenta un par de metanefridios, que es una estructura más sencilla que los protonefridios. Consta de un embudo o pabellón ciliado: nefrostoma, luego un conducto contorneado: nefroducto y por último un poro en la cavidad paleal, llamado nefroporo.
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